¿Irías a visitar a un cliente en chándal? Pues tampoco tengas tu web o tu tienda en línea hecha un trapo, en tu idioma original y en la traducción, porque es lo primero que van a ver tus posibles clientes, incluso antes de verte a ti.
Desde que empecé en el mundo de la localización de software en 2001, he traducido muchos programas, dispositivos, aplicaciones móviles, páginas web y tiendas en línea, desde la última versión del software de tu móvil hasta el manual de tu lavadora.
Aunque lo conozcamos como localización de software, en este campo entra todo: la interfaz de usuario, el manual de instrucciones, la ayuda en línea, una base de conocimientos, y hasta la licencia del producto o la política de cookies de tu web.
Tu fondo de armario en localización de software, páginas web y aplicaciones móviles:
Al cambiar de un idioma a otro el texto puede ser más largo o más corto y esto puede afectar al diseño de la web o del software. Por eso también los traductores nos encargamos de la fase de testeo, en la que no solo nos aseguramos de que el texto esté bien traducido y que no se haya colado ningún error, sino que vemos si hay que abreviar nombres de botones o menús, si los enlaces en la web funcionan y muchas otras cosas más.
¡Imagínate salir a la calle con un traje recién hecho y que no hayan quitado los pespuntes del hilvanado! Pues lo mismo ocurrirá con tu web.